Todos hemos visto esos maravillosos powerpoints, o un artículo en revistas o un reportaje en televisión (ayer mismo en TVE, dentro del programa «¿Cuanto ganas?» o «¿Cuánto cobras?» o algo así…). El caso es que después de ver esas instalaciones, ese estilo de trabajo, esa forma de entender la empresa… (y esos sueldos, aunque no los sepamos con exactitud) uno acaba diciendo: «Quiero trabajar en Google»
Google, como empresa, mola. Es joven (y con gente joven trabajando allí), llena de talento y prácticamente todo lo que saca es un avance en nuestro día a día. Pero si nos hubieran enseñado esas mismas fotos de esas instalaciones y la empresa hubiera sido otra, nuestra respuesta hubiese sido la misma: «Quiero trabajar ahí».
¿Por qué? Porque al fin, hay empresas que entienden que el mayor valor que tienen son sus trabajadores. Por eso se preocupan de tener a los mejores. Y tenerlos bien pagados y bien tratados (horarios flexibles, restaurante gratis, videojuegos, salas de relax…). Y por si fuera poco, con tiempo para proyectos personales.
Obviamente no todas las empresas van a poder tener estas instalaciones y estas condiciones. Pero no se trata de aplicar medidas concretas: se trata de aplicarlas pensando en el trabajador. Cuando una persona se siente valorada, involucrada en un proyecto, sabiendo que lo que hace sirve para algo, rinde mucho más. Cuando sabe que si tiene un problema, la empresa está ahí para ayudarle, no le importará echar una mano a la empresa y trabajar más si hace falta.
Si a todo eso le sumanos poder hablar directamente con los jefes, sin tanta jerarquía, sin tanto embrollo, la empresa se convierte en un ente más rápido, más flexible. Al final, se convierte en una empresa con marca, con calidad. Una empresa ganadora. ¿Llegaremos a ver esto algún día en nuestras empresas?
totalmente de acuerdo. yo estuve en google-dublin donde trabajaba una amiga y nos invitó a comer allí y es tan agradable como parece: lugares comunes de esparcimiento, comida gratis, tiempo para proyectos propios…
la conclusión que yo saqué es que eso está genial siempre que los trabajadores no se «aprovechen» de ello y abusen, y me da que en España sería objeto de gran abuso muchas de estas medidas (imagina comida gratis o sala de videojuegos estarían arrasadas) , habría también que «educar» o poner en valor para que se supieran aprovechar convenientemente.
Mucho tiene que cambiar el concepto empresarial en España para que vayamos tomando ejemplo de esta empresa. Por desgracia aquí estamos más cerca de compararnos con esclavos que con partes activas e involucradas de un proyecto empresarial. No estoy de acuerdo con Jesús en eso de que en España los trabajadores se aprovecharían de una empresa así, de hecho Google tiene sede en España con trabajadores españoles y funciona exactamente igual que en el resto del mundo, la cuestión no está en las personas, sino en tratarlas como números sin importancia o como piezas clave para que algo funcione…sentir que lo que haces es valorado y que un gigante empresarial como este confía en ti y en tu talento, no da lugar al escaqueo y a la picaresca.
Tampoco estoy de acuerdo con Jesús. En realidad, estoy en absoluto desacuerdo, porque en España quienes se suelen aprovechar no son los trabajadores, sino los jefes. Y no me refiero a los empresarios, que esa es una condición que suelo respetar salvo excepciones tipo Díaz Ferrán o similar, sino a los directivos, que son quienes tiran de tarjeta VISA, coche de empresa, Bonus, BalckBerry, Seguro Médico, etc., y se escapan de la oficina «a una reunión» consistente en echar una canita al aire o lanzar unas bolas en el Driving Range. Todo ello, como sabemos, a costa de lograr rebajas de todo tipo para quienes siendo sus compañeros de plantilla y circunstanciales subordinados sacan la tarea adelante.
De hecho, desde que hace lustros desembarcaron en nuestro país empresas como Opel y demás no existe trabajador español que rinda más y mejor que aquel que forma parte de las multinacionales extranjeras con sede en nuestro país.
Creo que la prueba del nueve son los pocos directivos españoles que lideran en el extranjero empresas que no sean de capital nacional…
En resumen: fallan los jefes, porque su mentalidad es la que antaño defendiera la reacción, no los indios.
Por cierto: mi pequeña iniciativa edtorial responde al espíritu de Google, aún más familiar si cabe… Con despacho en mi propio domicilio y con los dos colaboradores conectados a través de la red, anoche acabamos cerrando un par de páginas a las 2 de la mañana. Antes, nos cruzamos los oportunos e-mails mientras unos veíamos el Francia-España, otros cenaban y a saber qué hacía el tercero.
Llega un momento en que lo importante, como siempre ha sido así, es el rendimiento. Los que se pasan todo el día leyendo el periódico o reenviando Powerpoints es porque no tienen otra cosa que hacer. Y casi nunca es culpa suya. Otra cosa es que yo estuviera de acuerdo en trabajar así… que no lo estoy. Pero hay veces en que no se puede optar y lo primero es lo primero: comer.
pues yo estoy en total y rotundo acuerdo con Jesús, qué quereis que os diga….
Vamos, que si soy yo, después de estar trabajando como un negro cuatro años y me encuentro una empresa así, la primera semana me la pasaba «por el forro» literalmente.
Esto es como todo, hay que apelar al sentido de la responsabilidad de cada españolito/a, y sí que es cierto por mucho que nos duela, que no estamos ni educados, ni preparados para un modelo así.
Aquí en Extremadura, existe un «algo parecido». Es el Gabinete de Iniciativa Jóven de Extremadura, dependiente de la Consejería de las Jóvenes.
Tienen horario europeo, y aunque no salas con billar y hamacas, sí tienen un carácter muy abierto en cuanto al trabajo y a la manera de trabajar.
A ver, digamos que estoy de acuerdo con todos y con ninguno, aunque parezca raro. Por una parte, estoy de acuerdo con que es díficil implantar en España que todas las empresas funcionen así, pero no porque seamos unos vagos, sino porque en Google se trabaja por objetivos, así es cómo puede funcionar este tipo de empresa. Si tú terminas tu trabajo a tiempo, te puedes ir a casa, pero si no lo terminas o te quedas, o cobras menos, y la mayor parte de los españoles o no están de acuerdo con este tipo de remuneración o simplemente no estamos acostumbrados. Con un sistema así, es imposible que nadie se pase el trabajo «por el forro» como dice Pedriki, pero a su vez claro que está permitido que tú decidas cuando tienes la cabeza o el cuerpo saturado y te tomes un descanso en la sala de billar, porque tú te organizas como quieres.
Os tomáis la parte por el todo. No se trata solo de los horarios, es un concepto de trabajador diferente.
Trabajar por objetivos es precisamente un método que favorece a los que no son unos vagos, pero perjudica a los que están más limitados. Por eso en ese tipo de empresas tienen a los mejores, a los que son capaces de llegar, a los que resultan más productivos para la empresa, y por eso ese tipo de trabajadores pueden permitirse el lujo de tener más beneficios, mejores sueldos y más libertad. Al fin y al cabo hacen ganar al empresario, por eso interesa tenerlos contentos. En España hay mucho empresario cacique, pero también hay mucho trabajador que de trabajador solo tiene el nombre, por eso este sistema acaba con ese tipo de parásitos que perjudican a empresarios y trabajadores por igual.
en el ultimo curro q tuve antes de venirme a asia, era un pub, pero un rollo asi: todos estabamos involucrados en todos los proyectos, los jefes eran como nuestros papis, y contaban con nuestras ideas y opinion para todo… ademas, si necesitaban darnos flexibilidad de horarios por proyectos o motivos personales no habia problema… y no veas como rendiamos, en año y pico hicimos del local, el lugar de moda en graná!! ^^’
ains una de las cosas q mas echo de menos, con eso te lo digo to’!!
un abrazo mr cartier!!!!! no conocia las instalaciones d google, desde luego no me importaria currar alli ^^’
Joe! Vaya capacidad de analisis que tienes… Mi enhorabuena por echar mas mierda a internet con tus «¿textos?»…
Siempre es agradable recibir comentarios, Maestro.
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Tampoco estoy de acuerdo con Jesús. En realidad, estoy en absoluto desacuerdo, porque en España quienes se suelen aprovechar no son los trabajadores, sino los jefes. Y no me refiero a los empresarios, que esa es una condición que suelo respetar salvo excepciones tipo Díaz Ferrán o similar, sino a los directivos, que son quienes tiran de tarjeta VISA, coche de empresa, Bonus, BalckBerry, Seguro Médico, etc., y se escapan de la oficina “a una reunión” consistente en echar una canita al aire o lanzar unas bolas en el Driving Range. Todo ello, como sabemos, a costa de lograr rebajas de todo tipo para quienes siendo sus compañeros de plantilla y circunstanciales subordinados sacan la tarea adelante.
De hecho, desde que hace lustros desembarcaron en nuestro país empresas como Opel y demás no existe trabajador español que rinda más y mejor que aquel que forma parte de las multinacionales extranjeras con sede en nuestro país.
Creo que la prueba del nueve son los pocos directivos españoles que lideran en el extranjero empresas que no sean de capital nacional…
En resumen: fallan los jefes, porque su mentalidad es la que antaño defendiera la reacción, no los indios.