La importancia de tener un enemigo

Miles de jóvenes se manifestaron ayer contra su sinfuturo. Ven un panorama negro: sin posibilidad de tener trabajo (ni hablar ya de uno con contrato fijo y buen sueldo), con los precios de la vivienda por las nubes y con títulos en su currículums que no sirven de nada.

Pero, exactamente, ¿contra qué o contra quién se manifestaron? Yo, la verdad, no lo sé. Alguno me dirá que contra el sistema. Sí, pero ¿quién es el sistema? El sistema somos todos. Vale, algunos tienen más poder y son más sistema que otros. Pero entonces, ¿por qué no se puso su nombre en alguna pancarta?

No quiero que nadie interprete esto como una crítica a la manifestación. Al revés, me alegro de que, por fin, estas manifestaciones empiecen a surgir en nuestro adormecido país. Siempre he dicho que desde el bar (o desde twitter) el mundo no va a cambiar, por mucho que discutamos. Quizá desde detrás de una pancarta tampoco… pero es el primer paso. Lo único que quiero plantear es que me parece que está mal enfocada. Ayer, ningún político (ni alcalde, ni presidente de comunidad, ni presidente de gobierno), ni ningún empresario (banquero, promotor, constructor) ni ningún loquesea se sintió aludido. Iba contra todos, pero eso hace que no vaya contra nadie. Nadie moverá un dedo, ni se habrá sentido presionado a hacerlo, al menos. Por eso es importante tener un enemigo, una cara con nombre y apellidos a la que gritar y criticar y pedir y denunciar.

Esto es algo parecido a lo que he comentado con #nolesvotes. Allí el problema es justo el contrario, que no tienen un amigo (por usar el símil del título). Mientras piden que no se vote a PP ni PSOE (ni a CiU) sus votos se dispersarán entre la abstención y los grupos minoritarios. En el mejor de los casos (para ellos) conseguirán que uno de esos minoritarios gobierne con uno de los grandes. Aunque pueda ir en contra del partido en el que milito, creo que #nolesvotes debería decidirse por un único partido (el que quieran y como quieran) o incluso crear uno.

Ojalá estas iniciativas sigan adelante, porque más que importantes, son necesarias. Pero creo que es mucho más útil ir a conseguir avances concretos que pedir una mejora general… Ojalá todos nos movamos hasta llegar a esa playa…

 

 

11 comentarios

  1. Hola, amigo tuitero:)
    Ayer leí en la prensa que alrededor de 1000 personas (en El País) y 3000 (en El Mundo), habían participado en esta manifestación. Siendo el lema, «Sin trabajo, sin casa, etc…» a mí me pareció que eran muy poquitos los jóvenes que se manifestaron.
    Yo le pregunté a mi hija (21 años): «Tu te consideras una generación sin futuro, sin casa, etc?». Me miró con cara de extrañeza y me contestó: Yo no!!!!. Ah, le respondí, entonces no tienes que ir a la manifestación. Y te aseguro que somos una familia de la clase media para abajo, autónomos de toda la vida, sufriendo la crisis como todo autónomo que se precie.
    Yo, me vas a permitir que diga, creo que estas manifestaciones las hacen los niños pijos y sus padres y abuelos, fruto de una educación que les han dado pesimista y agorera, de tipo político de la derecha más recalcitrante.
    Si mi madre levantara la cabeza, diría: «Pues cuando terminó la guerra menos futuro había para muchos, y ahí salimos adelante».
    Como bien dices, hay que planterse metas, propósitos, avances en la mejora de la sociedad, pero para eso hay que ponerse a trabajar, en lo que sea, dejando el título para mejor ocasión.
    Un abrazo.
    Eva Herrero.

  2. Situaciones particulares hay muchas, y maneras de afrontarlas también. Yo nunca he pensado que no tuviera futuro (por cierto, que no me sumé a la manifestación) aunque sí creo que en muchos aspectos lo tenemos jodido. Quizá con 21 años tu hija (desconozco el caso y es solo un ejemplo) aún no ha visto como durante años (aún es muy joven) entrega su CV con una carrera, idiomas y demás… y le dan con la puerta en las narices.
    Claro, la situación es mala para todas las edad, no solo para los jóvenes, así que muchos podrán decir que a los parados de más cincuenta años les pasa lo mismo. Y tendrían razón, pero una cosa tampoco invalidaría la otra.
    Y no sé que educación habrán recibido esos chavales, quizá, como dices, sea demasiado pesimista. En eso te doy la razón, aunque dudo mucho que sean de derechas, la verdad.

    Y hombre, lo que vino después de la guerra no es que fuese, precisamente, para elogiar.

  3. Tengo otro hijo, de 27. Es un mileurista, que prefiere con el dinero que gana, tener su banda de música, gimnasio de competición (powerlifting), coche, viajar, etc. y de momento, vivir en casita sin preocuparse de nada más. Por lo tanto, no le dejo que proteste por nada. Cuando, influenciado por algunas amistades, se pone en plan quejicoso, le freno, porque el mensaje que hay que darles es que, si quieren tener casa, etc, deben quizás, sobre todo en familias que no son ricas precisamente, abandonar algunos lujos. Hay que luchar mucho, amigo Carty, para hacerte un hueco en la vida. Todo depende el hueco que quieras rellenar.
    Por cierto, cuando dices que los manifestantes no se manifestaban contra alguien en particular, es el típico mensaje de: Todos los políticos son iguales. Y ese mensaje lo he oído mucho de gente que luego vota a la derecha.
    Tb es verdad que hay situaciones de todo tipo, habría que estudiar caso por caso. Pero no me creo que la gente joven de ahora lo tenga peor que lo tuve yo en los años 80. Tantas crisis pasadas y tantas medio superadas, y ahora esta para rematar.
    Pero yo me considero una superviviente y asi pienso seguir, haya el gobierno que haya.
    Otro abrazo.

  4. Hay aspectos en los que claramente la situación está peor que entonces, y son dos claves: la vivienda (más cara que en los 80) y el empleo.
    Siempre ha sido complicado encontrar trabajo, por supuesto, pero cuando uno lo encontraba era más fácil tener cierta estabilidad. Ahora eso es (casi) imposible.

    Además, hay otro factor importante, que tiene su origen en la universalización de las universidades, y es que ahora mismo muchos de esos jóvenes sin empleo se siente frustrados al ver que encima están sobradamente capacitados (en muchas ocasiones mejor que empleados que llevan décadas en sus puestos). Contra eso es complicado luchar psicológicamente.

    Y sí, por supuesto que hay que renunciar a cosas. No se puede vivir con los lujos de mamá y papá y querer las ventajas de vivir solo.

    Por cierto, muchos extremaizquierdistas se comportan como la derecha en algunos aspectos.

  5. Ah, no te quepa la menor duda, los extremos se tocan.
    Cierto es que los jóvenes de ahora, con su licenciatura, masters, idiomas, etc, se sienten frustrados porque parece que de poco les vale. Entonces es que algo se ha hecho mal en la educación. Como ya hace tiempo en Europa, hay que promocionar y dar calidad en las formaciones profesionales. Me acuerdo, cuando era pequeña, que mi padre, que estuvo trabajando con americanos, decía que ellos a sí mismos se denominaban ingenieros, cuando resulta que eran técnicos de lo que fuera.
    A lo que voy, que me enrollo, los padres le hemos dado una importancia extrema a que nuestros hijos tengan títulos y títulos. A su vez, padres y sociedad, les metemos en una vorágine de competividad enorme. Queremos que tengan una vida como la nuestra, a saber: Casa, hipoteca, coche tipo tipo audi o similar, hijos (dos), posición social (con lo que conlleva, pordios). Y eso yo no sé hasta qué punto es lo ideal.
    En fin, que yo creo que cuando ya tienes cerca de los 30 años, tienes que tener clara cuales son tus valores y lo que quieres conseguir en la vida. Si lo expuesto antes es lo que se quiere, pues a por ello. Si al final de tu vida todo no lo has conseguido, bienvenido al club.

  6. Estoy totalmente de acuerdo, sobre todo, con lo de #nolesvotes. No vale de nada que digamos que no les votemos a unos sin decir a quien votar. Hacen falta propuestas eso está claro. hay que huir de la apolítica. La política, la economía, son temas que, nos guste o no, son tocan muy de lleno.

    Un saludo

  7. Lo que a mi me preocupa de nolesvotes es el motivo de su nacimiento: ¡las descargas! No el precio de la vivienda, el hambre en el mundo, el paro… no, no, las descargas.
    Independientemente de eso, y utópicamente, un nolesvotes extendido a todos sería magnífico, léase Elogio de la lucidez.
    ¿De verdad es necesario un enemigo? ¿De verdad es necesario alguien concreto a quien culpar? ¿Y si somos todos culpables / responsables / cómplices?
    El problema de la evolución es que cada vez te distancias más del punto de partida. Y ahora la clase media estamos acostumbrados a ciertos «lujos» que adquirieron nuestros padres y que ahora se nos antojan imprescindibles, y no estamos dispuestos a dar un paso atrás ni para tomar impulso. Ahora internet es un derecho, y yo aún recuerdo el día en que mis padres pusieron el teléfono, o cuando llegó la tele en color. Emanciparse puede ser duro, puede ser difícil, sin duda, pero imposible en muchos casos si pretendes vivir como en casa de mamá pero sin aguantar a mamá. No critico (no puedo) el aceptar las ayudas de papá y mamá, pero casos como el del hijo de Eva los he visto llevados al extremo: gente que podría emanciparse y apañarse perfectamente, renunciando eso sí a ciertos «lujos», y que sin embargo prefieren mantenerse en el nido familiar viviendo «a tutiplen».

  8. Hola, Antonio. Es cierto que muchas cosas que mencionas de la manifestación son una debilidad de ese movimiento, pero a la vez son también la característica más preocupante de la situación que denuncia. No podemos ser ajenos a que en los países de nuestro entorno, pero sobre todo en el nuestro, muchísimos jóvenes no ven esperanza ni en el mercado ni en la política, incapaces de asegurarles un futuro digno (un 40 % de desempleo juvenil es inaceptable) a pesar de todo el esfuerzo que realizan (realizamos).

    Al final nos encontramos con una generación (la que el director del FMI ha llamado groseramente «generación perdida») que tiene más formación que su predecesora, pero peores perspectivas, algo que inevitablemente lleva a la frustración y a la que los partidos no están dando respuesta. Y mucho me temo que si los partidos de izquierda no actuamos, no solo perderemos el voto de estos ciudadanos, sino que además lastraremos sin remedio el progreso del país.

    Un saludo y enhorabuena por tu blog.

  9. Pingback:Protesta y enfado dirigidos al objetivo

  10. Yo creo que sí había un enemigo, al menos en el manifiesto lo dicen:
    nos dirigimos a la opinión pública para mostrar nuestro desacuerdo con la política de recortes sociales del Gobierno.
    No vi a sindicatos de clase en la mani. Ni apoyando el manifiesto.
    Solo vi grupos de extrema izquierda, anticapitalistas, IU, movimientos ecologistas, todo mezclado.
    Ojo porque parecerá que solo esos jóvenes (fácilmente manipulables cuando tienen 18 años y acaban de entrar en la universidad) son los que están descontentos.
    O mucho cuidado con no estar en esas manifestaciones porque al final los panfletos que llegan a esos jóvenes de 18 fáciles de manipular…puede ser en muchos casos demagogia de la extrema izquierda…ojo!

    Solo puedo decir que en esa manifestación no hubo ni un solo representante de la juventud social-demócrata. Y eso es un lujo que no nos podemos permitir.

    Eva, creo que no deberías tomar solo como ejemplo el caso de tus dos hijos. Hay que saber ver más allá. No solo analizar de lo que tenemos en casa…

    Antonio, creo que el enemigo estaba claro. El Gobierno. Así lo pone en su manifiesto. Otra cosa es que en la mani se abanderaran muchas otras causas.

    La gente necesita un motivo por el que salir a la calle. Y muchos colectivos aprovechan para sumarse.

    El otro día se convocó otra contra la política ambiental de Gallardón en Madrid. Tampoco vi ningún representante de la juventud socialdemócrata…

    ¿estamos perdiendo las calles??? ¿Nos estamos encerrando demasiado en nuestras agrupaciones y si no salimos a la calle si no hay un beneficio electoral o propagandístico aunque la causa sea justa?

    Con no les votes estoy de acuerdo que es una lástima que lo hayan hecho por las descargas y no por el hambre en el mundo, el paro, etc. Que creo que son temas más importantes.

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