Se acaba un octubre duro y especial. Con dos triatlones y mi primera media maratón (junto a otro entrenamiento previo de 21 kilómetros dos semanas antes) los motivos creo que no necesitan mucha explicación.
Si hace 6 meses me hubieran dicho que antes de acabar el año habría acabado tantas carreras no me lo habría creído. No he hecho tiempos milagrosos, claro. Pero después de un tiempo «parado», estoy muy contento con la evolución.
Creo que fue a finales de mayo o principios de junio cuando pensé en correr una media maratón. Hasta entonces lo máximo que había corrido seguido eran 10 kilómetros. No podía ir demasiado deprisa, pero acababa (casi) siempre con la sensación de poder seguir algún kilómetro mas. El domingo, tras los 21 kilómetros (21.5 según el GPS) acabé con una sensación parecida. No podría haber llegado antes (hice 2 horas y un minuto) pero podría haber hecho un par de kilómetros más si fuera necesario.
La carrera salió prácticamente como la habíamos hablado: iba a correr con dos primos, uno de mi mismo nivel y otro que nos iba a acompañar a nuestro ritmo, pero que podía ir mas rápido. Nos planteamos las dos horas como objetivo secundario (el primero era acabar), por lo que el ritmo objetivo era de 5.40. Los primeros kilómetros salieron un poco más lento, pero poco a poco fuimos cogiendo ritmo. Siempre estuvimos un poco por encima de la previsión de dos horas, pero poco. Los kilómetros avanzaban y me sentía bien. Incluso llevaba la sensación de poder correr mas. Tenía la certeza (por sensaciones y por aquel entrenamiento dos semanas antes) de que acabaría la carrera sí o sí.
Sobre el kilómetro 15 uno de mis primos se quedo un poco rezagado. Al principio quisimos esperarle, pero ya estábamos en ese punto en el que nadie puede tocar tu ritmo, ni para arriba ni para abajo. Al final solo llego 3 minutos mas tarde. En el 19 me tocó a mi quedarme atrás. Ya estábamos llegando y el primo con el que iba quiso apretar un poco. Yo no pude más que mantener el ritmo que ya llevaba. Al final, entrada al polideportivo, brazos en alto y la satisfacción del objetivo cumplido.
¿Y ahora? Ahora a descansar un poco y empezar a entrenar de cara a 2012. Con dos objetivos claros y para los que voy a necesitar aumentar un poco (o bastante) el volumen de entrenamientos: El Maratón de Madrid (22 de abril) y algún triatlón en distancia olímpica (1.500 metros de natación, 40 kilómetros de bici y 10 kilómetros corriendo). ¡Comienza la pretemporada 2012!
Ampliación: Tal y como me pide exige Pepe Roldán, debo meter en mis objetivos de 2012 los 101 kilómetros de Ronda. Sí, estamos locos…
Enhorabuena, esto de superar retos es lo que te hace realmente feliz… Bueno, eso y que el RM gane la liga o algo asi, pero los milagros son casi imposibles, jajajajja 🙂
Un abrazo melón
Muchas felicidades amigo,
no hay nada como ir rompiendo barreras.
Esto da fuerzas para atacar los objetivos del próximo año.
Exigo una rectificacióninmediata y colocar entre los objetivos de 2012 los 101 de Ronda. Amos a ver!
Joder qué mal escrito está todo. «Exijo» una rectificación de mi comentario!!!
Ahora ya sí!! 😀