Pero no te olvides de Haití

Que Forges es un auténtico crack no hace falta discutirlo. Lo demuestra cada día en elpaís desde hace mucho tiempo. Pero en el último mes, si algo de él me ha gustado, es esa coletilla que acompaña cada una de sus viñetas: Pero no te olvides de Haití.

Esa frase, ese grito callado es algo más que un recuerdo a Haití. Al menos yo no lo leo, simplemente, como un mensaje a un pueblo destruido. Cuando leo Haití estoy leyendo decenas de países que viven en su misma situación, ya sea por desastres naturales, por corrupción, por guerras, o por un poco de cada. Cuando leo Haití estoy leyendo a todos esos países grandes que tienen en sus calles a miles de vagabundos, sin techo y sin comida. Cuando leo Haití, yo, por lo menos, leo un grito de solidaridad con el mundo. Que sepan que no están solos. Que sepamos todos que no estamos solos en la tarea de conseguir un mundo mejor.

2 comentarios

  1. Entrañable entrada, si señor. Y le ha quedado a usted muy poética.

    Un Saludo.

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